04 abril 2008

Psicología Colectiva y Socioconstruccionismo: Puntos de Encuentro y de Divergencia


El profesor Pablo Fernández Christlieb, de la Universidad Nacional Autónoma de México - UNAM, visitó hace poco a mi amada Bogotá y tuve el placer de conocerlo en una conferencia que presentó en una de las universidades de la ciudad. Para mi dicha, pude filmar toda la conferencia con mi humilde cámara; ese es el motivo de la borrosidad de la imagen en esta entrada.

Como dato curioso de Pablo Fernández, Josep (co-administrador de este blog) confesó que el profesor Fernández asesoró la tesis de quién luego asesoró la tesis del mismo Josep, me refiero a la profesora de la UAB: Adriana Gil.

Al cierre de la intervención del profesor Fernández, tuve la oportunidad de hacerle una pregunta, la cual quise transcribir a continuación, junto a su respectiva respuesta. Tanto mi pregunta como su respuesta justifican el nombre de esta entrada…

Gerardo G. (o sea yo): Encuentro muchísimas conexiones entre la psicología colectiva y el socioconstruccionismo, pero entonces, a partir de un nombre distinto supongo que tendrán no la misma constitución, sino tanto puntos de encuentro como puntos de divergencia: me gustaría conocer qué puntos de encuentro y qué puntos de divergencia ve entre esta psicología colectiva y el socioconstruccionismo.

Pablo Fernández:Dicho rápido, el socioconstruccionismo plantea un poco el asunto de que la realidad está hecha del lenguaje, y por lo tanto, todo lo que uno diga es en alguna instancia lenguaje, y la realidad que queremos entender de cualquier otra manera, no existe. Entonces uno puede curarse en salud y decir: “Bueno, si yo digo que existe la realidad lo estoy diciendo con palabras, y por lo tanto, está dentro de ellas.” O si digo: “la realidad no existe o no sabe uno que tan real es”…. pues estoy de acuerdo. “Entonces todo conocimiento es un conocimiento inventado”… estoy totalmente de acuerdo. “Y lo que acabo de ver lo inventé”… sí, estoy totalmente de acuerdo. “Y una crítica y una historia de las sociedades es una intelección que uno hace porque esa no es la realidad”… totalmente de acuerdo. “Bueno, lo que tenemos es lenguaje para inventar los mundos y estar contentos”… perfectamente de acuerdo. “Y si no me quieren creer”… ¡estoy de acuerdo! (risas del público)

Dentro de la construcción de mi propia historia, la diferencia que yo vería con el socioconstruccionismo es con dos planteamientos del construccionismo en general. Uno: que todo sea lenguaje; por que concretamente la cuestión afectiva, los sentimientos, me da la impresión que no los puede reducir uno a etiquetas o a versiones. Piense en un afecto pasional de esos terribles: los celos, el demonio de los ojos verdes como dijo Shakespeare al respecto. Que eso sea lo que uno pueda decir… ¡si uno no puede decir nada cuando está en esa situación! Son justo aquello que está más allá de lo que se puede decir… lo que no está dentro del lenguaje. Hay una presencia y una realidad que no cabe dentro del lenguaje. O si uno quiere ponerlo de otra manera: el lenguaje es capaz de producir realidades que no están dentro del lenguaje… tan maravilloso es el lenguaje que incluso es capaz de producir aquello que no es lenguaje. Y entonces a partir de ahí se dice: “¡¿Bueno, qué hace uno con eso?!”

Eso por un lado, y por otro lado: la idea de la realidad construida que se va construyendo poco a poco. Respecto a ese límite que encuentra uno con el acento del discurso del lenguaje como última posibilidad de la realidad, ¿puede uno plantear una realidad que no cabe dentro del lenguaje? Como se dice del papel de la literatura y la poesía: “decir lo indecible”, cuyo ejemplo sería en este momento los celos, pero también, todo el resto de la cultura. Eso de repente no cabe o queda demasiado circunscrito, demasiado empobrecido, cuando uno lo hace meter solamente dentro del lenguaje. Y entonces, en ese sentido, por eso uno plantea mejor el concepto de forma que el concepto de discurso, porque “forma” implica lo que puede uno decir “de una forma”, la que quiera uno: la forma de una pintura abstracta, la forma de los celos, o la forma de una nube. Implica lo que uno puede decir, pero también, aquello que no puede decir. Y además, cuando uno encuentra una forma en los celos, los celos hacen con uno lo que se les antoja, es decir: uno está dentro del propio concepto. En ese sentido la idea de forma me resulta más rica, siendo para nada nueva la idea... creo que esto sería lo que podría decir.

Esas fueron las palabras de Pablo Fernández, y la pregunta que suscitó dichas palabras. Me gustaría saber qué opinas al respecto: ¿Qué ideas del profesor Fernández se conectan con las tuyas? ¿Cuáles se alejan de tus ideas? ¿Qué dudas te surgen al leer sus palabras? O si prefieres contestar: ¿qué sensaciones te generan en el momento al reflexionarlas?

9 comentarios:

  1. Muchisisisisimas gracias Gerardo por esta aportación!!!
    Recomiendo mucho seguir a Fernández-Christlieb no sólo por ser el maestro de mi maestra -Adriana Gil- sino por la enorme calidad de sus publicaciones, tanto desde un punto de vista psicosocial-colectivo, sino literario. Es un placer leerlo.

    Josep

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  2. "uno está dentro del propio concepto" no supondria que són dos entes diferentes?
    Pués intuitivamente, y sin querer enmendar la plana al maestro, yo diria que son lo mismo "uno es el propio concepto". Y asi recogiendo su ejemplo del monstruo de los ojos verdes (figura retórica que provoca un cierto reconocimiento de deseable) lo expresamos como estado "estoy celosa" o incluso como esencia "soy celosa". Yo diria que no "hacen con uno lo que se les antoja" sino aquello que decimos que hacen, desde nuestra realidad construida siguiendo sus límites. Podemos decir que han hecho que nos salga un sarpullido, que los celos son verdes y huelen a traición, o incluso que nos han obligado a matar o a emborracharnos, o que hemos muerto de celos, pero diria que no se nos ocurriria decir que nos sentimos bien estando o siendo celosos excepto que nuestros interlocutores también lo sean, en cuyo caso será permitido y aplaudido. En fin que los límites son relacionales en el lenguaje, y son los que determinan que és "lo indecible".
    Por otro lado me gusta lo de la "forma", recuerda a la performatividad del lenguaje, idea que recojí de J. Butler como muy valiosa. Al final no somos aquello que decimos ser?

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  3. o como decia alguien hace muchos muchos años...
    'Háblame para que yo te vea'.
    Lucio Anneo Séneca

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  4. o hace unos poquitos años...
    "La determinación tecnológica es sólo un espacio ideológico abierto para los replanteamientos de las máquinas y de los organismos como textos codificados, a través de los cuales nos adentramos en el juego de escribir y leer el mundo”
    Haraway, D.J. (1991). Ciencia, Cyborg y mujeres. La reinvención de la naturaleza

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  5. El pensamiento abstracto es parte del propio construccionismo. Darle forma al pensamienot abstracto es construccionismo, de la misma manera que el pesamiento abstracto de per se en nuestra mente es una forma de lenguaje, aunque sea tan solo en forma de potencial, de energia del pesamiento, a la que luego se le dará la forma apropiada con el lenguaje.
    Desde hace siglos la filosfia, ya con Platón o Parménides, ha defendido que la capacidad de pensar, la capacidad de potencial abstracto hace al hombre, y que más adelante las formas se transmiten por el lenguaje, construyéndose personal y socialmente dia a dia.

    Creo que el profesor nos recuerda, en cierta manera, el principio de la civilización...

    Ya lo dijo uno que sabia mucho...
    "Yo soy", i el verbo se hizo hombre...

    Nel

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  6. Mone y Manel: muy interesantes las ideas que nos ofrecen. Me alegra la forma como complementan las palabras del profesor Pablo, sin estar enteramente de caurdo con estas.

    Gracias

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  7. Asi como se dice que uno esta en el movimiento y no qu eel moviemiento esta en uno asi uno esta en el pensamiento no el pensamiento en uno

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  8. Ahh y recomiendo ampliamente chequen mas artículos de Pablo,siempre es un placer leerlo, he qui los links:

    http://antalya.uab.es/athenea/num8/sfernandez.pdf

    http://antalya.uab.es/athenea/num7/fernandez.pdf

    http://antalya.uab.es/athenea/num0/fernandez.pdf

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  9. Pablo Fernández, siempre me auxilia cuando algo no me queda claro, sin duda un profesor excelente...

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"What is Matter? Never Mind! What is Mind? No Matter!"

Calambur citado en Toulmin, Stephen (1990), Cosmópolis. Els transfondo de la modernidad. Barcelona: Península. Pág. 207.

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